Visitas

sábado, 28 de septiembre de 2013

Confesiones de un corazón descarnado: Wish you were here

Hoy me levanté pensando en ti, otra vez, desde este día gris... El recuerdo de tu mirada cristalina, de tu sonrisa inocente, inolvidable. Estabamos juntos y me quisiste a cambio de cariño, de humano a humano, con el corazón descarnado, desnudo, sincero. Me quitaste la coraza de mi vida pasada y no me mediste por lo que no tengo, ni por mi piel o mi etnia, o la bandera que me ata, no me pediste nada... 
Sólo cariño, amor, una sonrisa, un juego, sólo humanidad y con cada gesto, sí, con cada instante que me diste, me arrancaste el corazón y te quedaste con él.
Ahora que la distancia es el mundo recuerdo cada momento y no encuentro las palabras para explicar
que en tu mirada está el secreto de la felicidad y la plenitud y que no es más rico el que más tiene.
Una razón para amar África, niño del pueblo himba, eres tú.
¿Cómo explicar a un occidental que no necesitas nada? Lo tienes todo y por tí, por haberte conocido, soy un poco más feliz, porque he visto tu luz y ahora sé como debería ser... Vida pura y descarnada, inocencia, ternura, pasión y alegría.
Tú, niño himba, en tu mirada, escondes el secreto de la felicidad y yo, ahora que pienso en tí, querría estar contigo para disfrutar otra vez de la humanidad que hemos perdido... Y desearía poder llegar al fondo de cada corazón que lea esto para decirle de humano a humano: wish you were here...

Enlace para ver Wish you were here. David Gilmore (de Pink Floyd, versión acústica subtitulada al castellano)







4 comentarios:

  1. Pues si que has llegado al fondo de mi corazón con la historia del niño himba… me ha emocionado su limpia mirada y la ternura tan de cerca. Deberíamos aprender el secreto de la felicidad en la vida diaria de todos los niños himba que en el planeta existen y asi poder vivir entre lo sentimientos sanos.

    ResponderEliminar
  2. No hay nada como la inocencia infantil en estado puro. Todos deberíamos recordar que no hace tanto fuimos niños y que a menudo lo pasábamos mejor con (como en el anuncio) un simple palo, o juegos inventados y mucha imaginación. Lo que necesitan los niños, y el mundo entero, es cariño.

    ResponderEliminar
  3. Hola Anyna. No sólo es la inocencia de los niños. El pueblo himba, en general, aún no está maleado por el mundo occidental y es de agradecer. Eso es lo que hace especial los alrededores de Epupa. La gente es muy inocente en general y se sorprenden de cosas como ver hombres o mujeres de cuarenta años solteros, quieren saber de ti, quieren cantarte sus canciones y que les cantes las tuyas...
    Un niño español les regaló algunas canicas y no sabían como jugar con ellas, así que les enseñó, pero cuando ya no jugaban se las metían en la boca para guardarlas, porque no tienen bolsillos, sólo un taparrabos y un jersey para pasar el frío de la noche... Ojalá nunca se maleen por nuestro mundo, porque su autenticidad es lo más bello que tienen, algo que nosotros hemos perdido, por falta de humanidad, por un montón de cosas que vemos en la tv todos los días... Gracias por tu comentario

    ResponderEliminar